España está experimentando una notable transformación digital que la posiciona como un actor cada vez más relevante en el panorama tecnológico internacional. El país ha pasado de ser principalmente reconocido por sectores tradicionales como el turismo y la agricultura a convertirse en un ecosistema vibrante de innovación tecnológica. Según el Informe de la Década Digital 2023, España ocupa el tercer puesto en la Unión Europea en conectividad y el séptimo en materia de servicios públicos digitales, con niveles superiores a la media europea. Este cambio no es casual, sino el resultado de políticas estratégicas, inversiones público-privadas y el desarrollo de un ecosistema propicio para la innovación.

El crecimiento del sector tecnológico español se refleja en cifras concretas: el sector TIC facturó más de 120.000 millones de euros en 2022, lo que representa un crecimiento del 6% respecto al año anterior. Con más de 35.333 empresas que emplean directamente a 764.128 personas, el impacto sobre el PIB del sector alcanzó el 3,84% en 2022. Estos datos evidencian el dinamismo de un sector que está transformando la economía española y posicionando al país como un referente tecnológico emergente a nivel europeo y global.

La transformación digital de España: ecosistema tecnológico actual

El ecosistema tecnológico español se caracteriza por un crecimiento consistente y una diversificación cada vez mayor. El Plan España Digital 2026, alineado con el Programa de Política para la Década Digital 2030 de la UE, ha establecido una hoja de ruta clara para el desarrollo tecnológico nacional. Estos planes estratégicos persiguen una visión de la sociedad digital sostenible y centrada en el ser humano, lo que ha permitido avances significativos en áreas clave como la conectividad, la digitalización de las administraciones públicas y la innovación empresarial.

Un aspecto destacable de la transformación digital española es la cobertura de redes de muy alta capacidad: el 93% de la población tiene acceso a redes fijas de más de 100 Mbps, situándose 20 puntos por encima de la media de la UE. Esta infraestructura robusta ha sido fundamental para el desarrollo de nuevas industrias digitales y la digitalización de sectores tradicionales, permitiendo que España se posicione como un entorno idóneo para empresas tecnológicas tanto nacionales como internacionales.

La digitalización no es solo un proceso tecnológico, sino una transformación cultural que está modificando profundamente la forma en que las empresas españolas operan y se relacionan con sus clientes, proveedores y colaboradores.

El comercio electrónico representa otro indicador del avance digital en España, con un crecimiento del 12,7% en 2022 y ventas que superaron los 20.492 millones de euros según la CNMC. Este auge refleja cambios significativos en los hábitos de consumo y la creciente confianza en las transacciones digitales. Paralelamente, el peso del sector TIC en la innovación es notable: el 36,7% de las empresas que innovan en España pertenecen a este sector, según el Barómetro de la Economía Digital de AMETIC.

La madurez del sector tecnológico español se evidencia también en el liderazgo internacional de empresas como Telefónica, Amadeus, Indra o Everis, que desarrollan proyectos de vanguardia en mercados globales. Con 192.915 estaciones base de redes móviles y 59,3 millones de líneas móviles, España ofrece una sólida infraestructura de telecomunicaciones que atrae tanto a empresas extranjeras como a emprendedores y nómadas digitales que valoran la seguridad física y jurídica, la estabilidad social y la calidad de vida que ofrece el país.

Polos de innovación tecnológica en territorio español

España ha desarrollado diversos polos de innovación tecnológica distribuidos estratégicamente por todo su territorio, configurando un mapa de especialización que potencia las fortalezas regionales y crea sinergias entre diferentes sectores productivos. Estos hubs tecnológicos atraen talento, capital e iniciativas empresariales, actuando como motores de la economía digital española y catalizadores de la transformación tecnológica del país.

Barcelona como hub de startups y tecnología móvil: mobile world capital

Barcelona se ha consolidado como uno de los centros tecnológicos más importantes de Europa, especialmente en el ámbito de las startups y la tecnología móvil. La designación de la ciudad como Mobile World Capital hasta 2030 ha sido determinante para posicionarla como referente global en innovación móvil. Esta capitalidad se materializa en eventos como el Mobile World Congress, el mayor congreso de telefonía móvil del mundo, que atrae anualmente a más de 100.000 profesionales y 2.000 empresas expositoras.

El ecosistema emprendedor barcelonés destaca por su diversidad y dinamismo. Distritos como el 22@ han transformado antiguos espacios industriales en centros de innovación donde conviven startups, aceleradoras, universidades y centros de investigación. Este modelo de colaboración público-privada ha fomentado el surgimiento de empresas tecnológicas de éxito en sectores como el e-commerce, las tecnologías limpias, la salud digital y los videojuegos.

Barcelona también sobresale en el ámbito de la computación avanzada con el Barcelona Supercomputing Center , que alberga el superordenador MareNostrum, uno de los más potentes de Europa. Esta infraestructura de investigación de vanguardia impulsa proyectos pioneros en campos como la genómica, la meteorología y la inteligencia artificial, consolidando el papel de la ciudad como centro de excelencia en computación de alto rendimiento.

Madrid Valley: concentración de inversores y multinacionales tecnológicas

Madrid se ha convertido en el principal hub financiero y empresarial tecnológico de España, a menudo referido como "Madrid Valley" por su creciente similitud con el ecosistema de Silicon Valley. La capital española concentra el mayor número de fondos de inversión, venture capital y business angels del país, lo que facilita el acceso a financiación para proyectos innovadores en diferentes etapas de desarrollo.

El atractivo de Madrid para las multinacionales tecnológicas es innegable. Gigantes como Google, Amazon, Microsoft, IBM y Meta han establecido sus sedes españolas o centros de desarrollo en la capital, generando un efecto de atracción para otras empresas del sector. Este ecosistema se complementa con espacios de innovación como Madrid Nuevo Norte, un ambicioso proyecto urbanístico que pretende crear un distrito empresarial de vanguardia enfocado en la sostenibilidad y la tecnología.

La Comunidad de Madrid lidera, además, la creación de empleo tecnológico en España, concentrando aproximadamente el 32% de los trabajadores del sector TIC a nivel nacional. Las universidades madrileñas, junto con escuelas de negocios de prestigio internacional como IE Business School, contribuyen a formar el talento que nutre este ecosistema en constante crecimiento.

Valencia y Málaga: nuevos epicentros de emprendimiento digital

Valencia y Málaga han emergido con fuerza como nuevos polos tecnológicos, diversificando el mapa de la innovación española más allá de los centros tradicionales. Valencia se está consolidando como un hub especializado en tecnologías emergentes y sostenibilidad, impulsado por iniciativas como Valencia Startup Capital y el ecosistema alrededor de la Ciudad de las Artes y las Ciencias.

La Marina de Valencia se ha transformado en un vibrante distrito de innovación que alberga aceleradoras, espacios de coworking y empresas tecnológicas. Eventos como Startup Valencia y VLC Tech City han contribuido a crear una comunidad cohesionada que atrae talento nacional e internacional. Su combinación de calidad de vida, costes competitivos y una creciente red de apoyo al emprendimiento ha posicionado a Valencia como una alternativa atractiva para startups que buscan ubicarse en España.

Por su parte, Málaga ha experimentado una notable transformación hasta convertirse en el llamado "Málaga Valley". La ciudad andaluza ha apostado decididamente por la innovación tecnológica a través de iniciativas como el Parque Tecnológico de Andalucía, que alberga más de 620 empresas y genera más de 20.000 empleos directos. La reciente llegada de Google, con su Centro de Excelencia en Ciberseguridad, refuerza el posicionamiento de Málaga como referente en seguridad digital.

Parque tecnológico de Bizkaia: referente en industria 4.0

El País Vasco, y particularmente el Parque Tecnológico de Bizkaia, se ha consolidado como un referente en industria 4.0 y fabricación avanzada. Este parque, ubicado en Zamudio, constituye uno de los ecosistemas más maduros para la innovación industrial en España, con más de 300 empresas que emplean a más de 10.000 personas, muchas de ellas dedicadas a actividades de I+D+i.

La tradición industrial vasca se ha transformado hacia modelos de producción avanzados e inteligentes, con especial enfoque en sectores como la automatización, la robótica industrial, la fabricación aditiva y los nuevos materiales. Centros tecnológicos como Tecnalia e IK4 actúan como puente entre la investigación académica y las necesidades empresariales, facilitando la transferencia de conocimiento y la implementación de soluciones innovadoras en el tejido productivo.

El Basque Industry 4.0 es una iniciativa estratégica que coordina los esfuerzos público-privados para potenciar la transformación digital de la industria vasca. Este programa ha permitido desarrollar proyectos pioneros en ámbitos como el internet of things industrial, el mantenimiento predictivo y los gemelos digitales, posicionando al País Vasco como una región líder en la cuarta revolución industrial a nivel europeo.

Inversión y financiación del sector tecnológico español

El auge del sector tecnológico español está respaldado por un creciente ecosistema de financiación que combina fondos públicos, capital privado y mecanismos de apoyo a la innovación. Esta diversificación de fuentes de financiación ha permitido un desarrollo más sostenido y resiliente del ecosistema tecnológico, facilitando el crecimiento de proyectos en diferentes etapas de madurez.

Fondos NEXT generation EU: impacto en la digitalización nacional

Los fondos Next Generation EU representan una oportunidad histórica para acelerar la transformación digital de España. Con una asignación de aproximadamente 140.000 millones de euros para el país, de los cuales cerca del 33% está destinado directamente a la transición digital, estos fondos están catalizando inversiones estratégicas en áreas como la conectividad, la digitalización del sector público y privado, y el desarrollo de competencias digitales.

El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia articula la distribución de estos recursos a través de componentes específicos como el Plan de Digitalización de las Administraciones Públicas, el Plan de Digitalización de PYMEs y el Plan de Capacidades Digitales. Estos programas están impulsando la adopción de tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, el blockchain, el cloud computing , el big data y el internet de las cosas en el tejido empresarial español.

La implementación de estos fondos está teniendo un efecto multiplicador en la economía digital española, ya que las inversiones públicas están movilizando recursos privados adicionales y generando nuevas oportunidades de colaboración entre el sector público y el empresarial. Se estima que por cada euro de inversión pública en digitalización, se movilizan aproximadamente 3 euros de inversión privada complementaria.

Venture capital y business angels: el nuevo panorama inversor

El ecosistema de venture capital y business angels en España ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años. Según datos de SPAINCAP, la inversión en startups españolas alcanzó los 2.132 millones de euros en 2022, consolidando una tendencia al alza que refleja la madurez y el atractivo del ecosistema emprendedor español.

Fondos nacionales como Kibo Ventures, Seaya Ventures, K Fund o Samaipata están desempeñando un papel crucial en la financiación de startups en fases tempranas y de crecimiento. Paralelamente, fondos internacionales como Atomico, Balderton Capital o Accel Partners han aumentado significativamente su actividad en España, atraídos por el talento y la calidad de los proyectos tecnológicos españoles.

Las redes de business angels también se han profesionalizado, con iniciativas como Business Angels Network (BAN), ESADE BAN o IESE BAN que facilitan la conexión entre inversores privados y emprendedores. Estos inversores no solo aportan capital, sino también experiencia, contactos y mentorización, elementos fundamentales para el éxito de los proyectos en sus etapas iniciales.

Tipo de inversiónVolumen (millones €) 2022Crecimiento vs 2021Número de operaciones
Venture Capital1.865+12%258
Business Angels267+18%180
Crowdfunding103+25%95

CDTI y programas públicos de apoyo a la innovación tecnológica

El Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) es el principal organismo público de apoyo a la innovación tecnológica en España. Con un presupuesto anual que supera los 1.500 millones de euros, el CDTI ofrece una amplia gama de instrumentos financieros y no financieros para impulsar los proyectos de I+D+i de las empresas españolas, desde la investigación básica hasta la internacionalización de la innovación.

Programas como Innvierte, NEOTEC o CIEN facilitan la financiación de proyectos innovadores en diferentes fases de desarrollo. Además, el CDTI actúa como agente movilizador de la participación española en programas internacionales como Horizonte Europa, conectando el ecosistema innovador nacional con las iniciativas y recursos europeos en materia de investigación y desarrollo.

Junto al CDTI, otras iniciativas como ENISA (Empresa Nacional de Innovación) o los

programas regionales de apoyo a la innovación conforman un ecosistema de financiación pública que complementa las iniciativas privadas. Comunidades Autónomas como País Vasco, Cataluña o Madrid han desarrollado sus propias agencias y programas de impulso a la innovación tecnológica, adaptados a las necesidades específicas de sus tejidos empresariales.

Casos de éxito: rondas de financiación de glovo, cabify y wallbox

El ecosistema tecnológico español ha generado casos de éxito notables que demuestran la madurez del sector y su capacidad para atraer inversiones significativas. Empresas como Glovo, Cabify y Wallbox se han convertido en referentes de la nueva generación de compañías tecnológicas españolas con proyección global.

Glovo, la aplicación de entrega a domicilio fundada en Barcelona en 2015, completó su proceso de crecimiento con la adquisición por parte de Delivery Hero por 2.300 millones de euros, la mayor operación corporativa en el sector tecnológico español hasta la fecha. Previamente, la startup había levantado más de 450 millones de euros en diversas rondas de financiación, atrayendo a inversores internacionales como Rakuten, Drake Enterprises y Seaya Ventures.

Cabify, la plataforma de movilidad urbana, ha consolidado su posición como uno de los unicornios españoles tras alcanzar una valoración superior a los 1.400 millones de dólares. La compañía ha completado diversas rondas de financiación, incluyendo una Serie E de 160 millones de dólares liderada por Rakuten Capital y The Venture City. Su capacidad para adaptar su modelo de negocio a las regulaciones locales y su apuesta por la sostenibilidad han sido factores clave para atraer inversores de primer nivel.

La capacidad de las startups españolas para competir globalmente demuestra la madurez del ecosistema tecnológico nacional y su potencial para generar empresas de clase mundial.

Wallbox, especializada en soluciones de recarga para vehículos eléctricos, representa otro caso paradigmático del potencial tecnológico español. Tras varias rondas de financiación que sumaron más de 100 millones de euros, la compañía dio el salto al Nasdaq en 2021 mediante una SPAC valorada en 1.500 millones de dólares. Este caso ilustra cómo una startup española puede escalar hasta convertirse en una empresa cotizada en los mercados internacionales en apenas seis años desde su fundación.

Sectores tecnológicos de vanguardia donde españa destaca

La evolución tecnológica de España no se ha limitado a un solo ámbito, sino que se ha diversificado en múltiples sectores de alto valor añadido. Esta especialización sectorial ha permitido al país desarrollar ventajas competitivas en áreas estratégicas donde confluyen el conocimiento científico, la capacidad industrial y la innovación empresarial.

Biotecnología y sector farmacéutico: pharmamar y grifols

España se ha posicionado como un actor relevante en el sector biotecnológico y farmacéutico, con empresas que han logrado reconocimiento internacional por sus avances científicos y su capacidad de innovación. PharmaMar representa un caso ejemplar de compañía biotecnológica española con proyección global, especializada en el descubrimiento y desarrollo de fármacos de origen marino para el tratamiento del cáncer.

La aprobación por parte de la FDA estadounidense de Zepzelca (lurbinectedina) para el tratamiento del cáncer de pulmón metastásico marcó un hito para la industria farmacéutica española, demostrando su capacidad para desarrollar medicamentos innovadores con reconocimiento internacional. PharmaMar ha construido un modelo de negocio basado en la investigación marina, un nicho donde España cuenta con ventajas naturales debido a su biodiversidad marítima.

Por su parte, Grifols se ha consolidado como líder mundial en medicamentos derivados del plasma sanguíneo, con una capitalización bursátil que supera los 10.000 millones de euros. La compañía catalana ha combinado crecimiento orgánico con adquisiciones estratégicas internacionales, convirtiéndose en un referente global en tratamientos para enfermedades raras y trastornos inmunológicos. Su apuesta por la I+D+i, con inversiones anuales superiores al 6% de sus ingresos, ejemplifica el compromiso con la innovación de las empresas biotecnológicas españolas.

Energías renovables: iberdrola y la revolución del hidrógeno verde

España se ha posicionado como líder europeo en el sector de las energías renovables, combinando condiciones naturales favorables con un decidido impulso empresarial e institucional. Empresas como Iberdrola han sido pioneras en la transformación del sector energético global, apostando decididamente por las energías limpias y desarrollando tecnologías que han revolucionado industrias como la eólica marina.

La apuesta de Iberdrola por el hidrógeno verde representa uno de los proyectos más ambiciosos en la transición energética europea. La compañía está desarrollando en Puertollano (Ciudad Real) una de las mayores plantas de hidrógeno verde del mundo, con una inversión de 150 millones de euros y una capacidad de producción de 3.000 toneladas anuales mediante electrólisis alimentada por energía solar fotovoltaica. Este tipo de iniciativas posicionan a España como referente en el desarrollo de combustibles limpios para la descarbonización de sectores industriales intensivos en energía.

El Plan Renovable español ha establecido objetivos ambiciosos que incluyen alcanzar los 60 GW de capacidad eólica y 39 GW de solar para 2030, lo que ha generado un ecosistema de innovación en torno a las tecnologías limpias. Empresas como Siemens Gamesa, con su centro global de I+D+i en España, o EDP Renewables, han convertido al país en un laboratorio de experimentación para nuevas soluciones en almacenamiento energético, redes inteligentes y gestión de la demanda.

Inteligencia artificial: ELLIS alicante y barcelona supercomputing center

En el ámbito de la inteligencia artificial (IA), España está emergiendo como un centro europeo de referencia gracias a instituciones de investigación de primer nivel y a una creciente comunidad empresarial especializada. La creación de ELLIS Alicante (European Laboratory for Learning and Intelligent Systems) ha situado a España en la vanguardia de la investigación en machine learning a nivel continental, atrayendo talento internacional y desarrollando aplicaciones prácticas en sectores como la salud, la movilidad y la sostenibilidad.

El Barcelona Supercomputing Center (BSC) constituye otra pieza fundamental del ecosistema español de inteligencia artificial. Este centro alberga el superordenador MareNostrum, infraestructura crítica para el desarrollo de modelos de IA avanzados que requieren alta capacidad de procesamiento. El BSC lidera proyectos europeos en campos como la IA explicable, la computación de alto rendimiento y el procesamiento del lenguaje natural, consolidando a Barcelona como hub de referencia en estas tecnologías.

La Estrategia Nacional de Inteligencia Artificial, dotada con más de 600 millones de euros hasta 2025, está potenciando la transferencia de conocimiento entre centros de investigación y empresas. Iniciativas como el programa ENIA Missions fomentan el desarrollo de soluciones de IA aplicada a retos sociales, mientras que el sello "Spain AI Certification" busca promover una IA ética y confiable que se alinee con los valores europeos.

Fintech: la disrupción de BBVA, santander InnoVentures y bnext

El sector financiero español está experimentando una profunda transformación digital, con entidades tradicionales que han sabido reinventarse y nuevos actores que están redefiniendo la experiencia bancaria. BBVA se ha consolidado como uno de los bancos más innovadores del mundo, desarrollando capacidades digitales avanzadas que le han permitido competir eficazmente en el nuevo entorno financiero global. Su plataforma de banca abierta, basada en APIs, ha facilitado la colaboración con fintechs y el desarrollo de nuevos modelos de servicio.

Santander InnoVentures (ahora Mouro Capital), el fondo de venture capital del Banco Santander, ha invertido más de 400 millones de dólares en startups fintech globales, actuando como puente entre el ecosistema emprendedor y la banca tradicional. Esta estrategia de innovación abierta ha permitido a Santander incorporar tecnologías disruptivas como blockchain, inteligencia artificial y biometría a sus servicios, mejorando la experiencia de cliente y optimizando sus procesos internos.

Paralelamente, han surgido neobancos nacionales como Bnext que están desafiando los modelos tradicionales con propuestas centradas en la experiencia de usuario y la transparencia. Estas startups fintech han captado más de 100 millones de euros en inversión en los últimos años, demostrando el atractivo del mercado español como laboratorio para nuevos servicios financieros. La creación del sandbox regulatorio financiero en 2020 ha proporcionado un entorno controlado para experimentar con innovaciones disruptivas, fortaleciendo el ecosistema fintech nacional.

Talento español en tecnología: formación y retención

El capital humano constituye el activo más valioso en la economía del conocimiento, y España está realizando esfuerzos significativos para formar, atraer y retener talento tecnológico. Sin embargo, este ámbito presenta tanto fortalezas como desafíos que condicionan la competitividad tecnológica del país a largo plazo.

Las universidades españolas están adaptando sus programas formativos para responder a las demandas del sector tecnológico. Instituciones como la Universidad Politécnica de Madrid, la Universidad Politécnica de Cataluña o la Universidad Carlos III han desarrollado grados y posgrados especializados en ámbitos como la inteligencia artificial, la ciberseguridad, el big data o la computación cuántica. Estos programas están acercando la formación académica a las necesidades reales del mercado laboral tecnológico.

Complementariamente, han proliferado iniciativas de formación alternativa como bootcamps y academias especializadas que ofrecen programas intensivos en desarrollo de software, data science o diseño UX/UI. Estas opciones formativas, más ágiles y enfocadas a habilidades prácticas, están ayudando a reducir la brecha entre oferta y demanda de perfiles tecnológicos, abriendo además nuevas vías de acceso al sector para personas provenientes de otras disciplinas.

El Informe Década Digital 2023 destaca que el 66,2% de la población española posee un nivel básico de competencias digitales, por encima de la media europea del 55,6%. Sin embargo, el porcentaje de especialistas TIC respecto al total de trabajadores (4,4%) se sitúa ligeramente por debajo de la media europea (4,8%), lo que apunta a la necesidad de seguir reforzando la formación especializada en este ámbito.

España ha implementado iniciativas como el programa Digital Talent o el Plan Nacional de Competencias Digitales para acelerar la capacitación tecnológica de la población activa. Paralelamente, la regulación del teletrabajo y la creación del visado para nómadas digitales están facilitando la atracción de talento internacional y la retención de profesionales españoles que valoran la flexibilidad laboral y la calidad de vida que ofrece el país.

Desafíos y oportunidades para consolidar a españa como potencia tecnológica

A pesar de los avances significativos, España enfrenta importantes desafíos para consolidarse como una potencia tecnológica de primer orden. El diagnóstico de estos retos, junto con las oportunidades emergentes, resulta esencial para definir estrategias que permitan al país dar el salto cualitativo que necesita en el panorama tecnológico global.

La financiación en fases avanzadas sigue siendo un obstáculo para el crecimiento del ecosistema tecnológico español. Aunque las rondas en fases seed y Series A están razonablemente cubiertas, existe un "valle de la muerte" financiero cuando las startups necesitan captar inversiones superiores a 50 millones de euros para escalar internacionalmente. La creación del fondo Next Tech, dotado con 4.000 millones de euros para impulsar el crecimiento de empresas tecnológicas, busca paliar esta carencia estructural.

La brecha entre investigación científica y aplicación empresarial constituye otro desafío relevante. España produce investigación de alta calidad (décimo país mundial en producción científica), pero presenta dificultades en la transferencia de ese conocimiento al mercado. Iniciativas como los Centros de Excelencia Severo Ochoa y los programas de doctorados industriales están contribuyendo a tender puentes entre academia y empresa, pero aún queda camino por recorrer en la comercialización eficaz de la investigación básica.

¿Podrá España capitalizar la relocalización de cadenas de valor estratégicas que está teniendo lugar a nivel global? La creciente importancia de la soberanía tecnológica en la agenda europea ofrece oportunidades para el desarrollo de capacidades industriales en sectores como los semiconductores, las baterías avanzadas o los materiales críticos. El PERTE de Microelectrónica y Semiconductores, con una inversión público-privada superior a 12.000 millones de euros, busca posicionar a España en este ámbito estratégico.

La digitalización de las PYMEs representa un imperativo estratégico para la economía española, donde estas empresas constituyen más del 99% del tejido empresarial. Según el Índice de la Economía y la Sociedad Digitales (DESI), solo el 27,2% de las PYMEs españolas utilizan servicios en la nube, por debajo de la media europea. El Kit Digital, dotado con más de 3.000 millones de euros, pretende acelerar esta digitalización mediante bonos de hasta 12.000 euros para la implantación de soluciones tecnológicas.

La colaboración público-privada emerge como factor clave para superar estos desafíos. Como señala Andrés Yin Hui, CEO de Huawei Iberia: "Solo a través de la colaboración activa y coordinada entre sector público y privado podremos superar todos los retos planteados. Si logramos aprovechar esta oportunidad, no solo fortaleceremos el tejido empresarial e impulsaremos la competitividad de España, sino que también conseguiremos construir una sociedad más comprometida e inclusiva".

España tiene ante sí la oportunidad histórica de consolidarse como referente tecnológico internacional, aprovechando sus fortalezas en conectividad, talento y calidad de vida. La convergencia de fondos europeos, capacidades científico-técnicas y un ecosistema emprendedor en expansión sienta las bases para un salto cualitativo en la economía digital española.