
España ha experimentado una notable transformación en su ecosistema de innovación durante la última década. El país, tradicionalmente conocido por sectores como el turismo y la construcción, ha logrado posicionarse como un referente en innovación empresarial a nivel europeo. Este cambio se debe a una combinación de factores estratégicos: un sólido ecosistema de startups, un marco regulatorio favorable, incentivos fiscales atractivos y una creciente colaboración entre el ámbito académico y empresarial. La apuesta por la digitalización de sectores tradicionales y el impulso a nuevas industrias tecnológicas han convertido a España en un terreno fértil para emprendedores e inversores internacionales.
El panorama innovador español se caracteriza por una distribución geográfica que concentra gran parte de la actividad en Madrid y Barcelona, aunque con polos emergentes en Valencia, Málaga y Bilbao. Las empresas españolas han sabido aprovechar las ventajas competitivas del país: talento cualificado a costes relativamente competitivos, calidad de vida atractiva para profesionales internacionales y una posición estratégica como puente entre Europa y Latinoamérica.
Ecosistema de startups español: Madrid y Barcelona como hubs tecnológicos europeos
El auge del ecosistema de startups español ha sido espectacular en los últimos años. Madrid y Barcelona se han consolidado como dos de los principales hubs tecnológicos de Europa, atrayendo inversiones y talento internacional. Según datos de Startup Genome, Barcelona ocupa el puesto 6 en el ranking europeo de ecosistemas de startups, mientras que Madrid se sitúa en el noveno lugar, con un valor conjunto estimado en más de 30.000 millones de euros.
Ambas ciudades ofrecen ventajas complementarias: Madrid cuenta con mayor presencia de grandes corporaciones y sedes empresariales, mientras que Barcelona destaca por su atractivo internacional y estilo de vida. Esta combinación ha generado un entorno competitivo y colaborativo que impulsa la innovación en múltiples sectores, desde el fintech hasta la biotecnología, pasando por las tecnologías limpias y la movilidad sostenible.
Distrito 22@ de Barcelona: transformación hacia un polo de innovación digital
El Distrito 22@ de Barcelona representa uno de los casos más exitosos de transformación urbana orientada a la economía del conocimiento en Europa. Este antiguo distrito industrial del Poblenou ha sido reconvertido en un ecosistema de innovación que alberga a más de 1.500 empresas tecnológicas, generando aproximadamente 60.000 empleos directos. La transformación comenzó en el año 2000 y ha supuesto la revitalización completa de una zona deteriorada, convirtiéndola en un imán para empresas innovadoras.
Entre las características que han hecho del 22@ un modelo de éxito destacan su planificación urbanística mixta (que combina espacios empresariales, residenciales, educativos y de ocio), la presencia de universidades y centros de investigación, y una estrategia clara de clusterización por sectores. Empresas como Criteo, King, Typeform o Glovo han establecido sus oficinas en este distrito, generando un efecto llamada para otras compañías tecnológicas internacionales y startups locales.
El distrito cuenta también con numerosos espacios de coworking, aceleradoras e incubadoras como Pier01 , gestionado por Barcelona Tech City, que se ha convertido en un punto de encuentro fundamental para el ecosistema emprendedor de la ciudad. La concentración de talento y empresas en un mismo espacio urbano facilita las sinergias y la transferencia de conocimiento, elementos esenciales para la innovación.
Madrid como epicentro del fintech español con ejemplos como bizum y BBVA next
Madrid se ha posicionado como el centro neurálgico del sector fintech español, albergando aproximadamente el 67% de las startups financieras del país. Su condición de capital financiera, con sede de los principales bancos y entidades reguladoras, ha favorecido el desarrollo de un ecosistema fintech robusto y dinámico. Proyectos como Bizum, nacido de la colaboración entre las principales entidades bancarias españolas, ejemplifican la capacidad de innovación del sector financiero tradicional.
BBVA Next Technologies representa otro caso de éxito en la transición digital del sector bancario. Esta filial tecnológica del Grupo BBVA emplea a más de 1.200 profesionales especializados en tecnologías emergentes como blockchain
, inteligencia artificial y big data
. La entidad ha sabido combinar la solidez de un banco tradicional con la agilidad de una empresa tecnológica, desarrollando innovaciones que han recibido reconocimiento internacional.
El ecosistema fintech madrileño se completa con startups como Bnext, Indexa Capital o TuFinanziacion, que están redefiniendo servicios financieros tradicionales mediante el uso intensivo de tecnología. La colaboración entre entidades financieras establecidas y nuevos actores disruptivos está creando un entorno particularmente fértil para la innovación en el sector.
El papel de la nave y south summit en la consolidación del ecosistema emprendedor
Iniciativas como La Nave y South Summit han jugado un papel fundamental en la consolidación del ecosistema emprendedor madrileño. La Nave, un centro de innovación urbana impulsado por el Ayuntamiento de Madrid, ofrece 13.000 metros cuadrados dedicados al emprendimiento y la innovación. Este espacio no solo proporciona infraestructura física sino que desarrolla programas de aceleración, mentorización y networking que han impulsado a cientos de startups locales.
South Summit, por su parte, ha evolucionado desde un evento local hasta convertirse en una de las conferencias de emprendimiento más importantes de Europa. Fundada en 2012, esta plataforma conecta anualmente a más de 20.000 asistentes, incluyendo startups, inversores y corporaciones de todo el mundo. En su edición de 2022, South Summit generó oportunidades de negocio valoradas en más de 4.500 millones de euros y atrajo a inversores que gestionan conjuntamente más de 120.000 millones en activos.
El valor real de eventos como South Summit va más allá de las cifras. Estos espacios crean comunidad y establecen a Madrid como un punto de encuentro internacional para el ecosistema de innovación, generando un impacto duradero en la percepción global de España como destino para emprender e innovar.
Startups unicornio españolas: casos de glovo, cabify y wallbox
El surgimiento de empresas unicornio (valoradas en más de 1.000 millones de dólares) constituye uno de los indicadores más relevantes del desarrollo del ecosistema emprendedor español. Casos como Glovo, Cabify y Wallbox demuestran que España puede generar empresas tecnológicas de calibre global. Glovo, fundada en Barcelona en 2015, revolucionó el sector de las entregas a domicilio y alcanzó una valoración superior a los 2.300 millones de euros antes de ser adquirida por Delivery Hero.
Cabify, por su parte, representa un caso de éxito en el competitivo sector de la movilidad urbana. Fundada en Madrid en 2011, la compañía ha logrado expandirse por España y Latinoamérica, diferenciándose mediante una estrategia centrada en la sostenibilidad y en ofrecer un servicio premium. Su valoración superó los 1.400 millones de dólares en 2021, consolidándose como uno de los unicornios españoles más estables.
Wallbox ejemplifica el potencial de España en sectores emergentes como la movilidad eléctrica. Esta compañía, especializada en sistemas de recarga para vehículos eléctricos, fue fundada en Barcelona en 2015 y en apenas seis años logró salir a bolsa en el NYSE, alcanzando una valoración de 1.500 millones de dólares. Su éxito demuestra la capacidad del ecosistema español para generar hardware tecnológico avanzado con proyección internacional.
Marco regulatorio e incentivos fiscales para la innovación
El marco regulatorio español ha evolucionado significativamente para fomentar la innovación empresarial, con especial énfasis en la simplificación administrativa y los incentivos fiscales. Esta evolución ha permitido crear un entorno más favorable para startups y empresas innovadoras, posicionando a España como uno de los países europeos con un régimen fiscal más atractivo para actividades de I+D+i.
La estrategia española de apoyo a la innovación combina incentivos directos (subvenciones y préstamos) con incentivos indirectos (deducciones fiscales), creando un ecosistema de apoyo integral que abarca desde las fases iniciales de investigación hasta la comercialización. Este enfoque holístico ha contribuido notablemente a incrementar la inversión privada en innovación, especialmente en sectores estratégicos como las tecnologías digitales, la biotecnología y las energías renovables.
Deducciones fiscales del 25% al 42% para actividades de I+D+i
El sistema español de deducciones fiscales para actividades de I+D+i destaca como uno de los más generosos de Europa. Las empresas pueden deducir entre el 25% y el 42% de los gastos asociados a proyectos de investigación y desarrollo, dependiendo de la naturaleza y alcance de las actividades. Este porcentaje puede incrementarse hasta un 17% adicional para gastos de personal investigador con dedicación exclusiva a I+D.
El diseño del sistema distingue claramente entre actividades de investigación y desarrollo (I+D) e innovación tecnológica (i), aplicando diferentes porcentajes de deducción a cada categoría. Para I+D, la deducción base es del 25% sobre los gastos efectuados en el período impositivo, incrementándose al 42% para gastos que superen la media de los dos años anteriores. Para actividades de innovación tecnológica, la deducción se sitúa en el 12%.
Una ventaja significativa del sistema español es la posibilidad de monetizar estas deducciones incluso para empresas que no generan beneficios suficientes, mediante el mecanismo de cash back
. Este instrumento permite recuperar hasta 1 millón de euros anuales en deducciones no aplicadas, facilitando que startups en fases iniciales puedan beneficiarse del sistema desde sus primeros años de actividad.
Patent box: ventajas fiscales para patentes y propiedad intelectual
El régimen de Patent Box constituye otro de los pilares del sistema de incentivos fiscales a la innovación en España. Este instrumento permite una reducción del 60% en la base imponible para ingresos derivados de la cesión de determinados activos intangibles como patentes, modelos de utilidad, diseños industriales o software registrado. El objetivo es fomentar no solo la generación de propiedad intelectual sino también su explotación comercial dentro del territorio español.
Para acogerse a este régimen, la entidad cedente debe haber creado los activos intangibles en al menos un 25%, asegurando así que el beneficio fiscal se aplica principalmente a empresas que realmente desarrollan actividades innovadoras en España. Esta medida se alinea con los estándares internacionales definidos por la OCDE en su proyecto BEPS (Base Erosion and Profit Shifting) para evitar la planificación fiscal agresiva.
Tipo de incentivo | Porcentaje | Requisitos principales |
---|---|---|
Deducción I+D básica | 25% | Actividades que cumplan definición legal de I+D |
Deducción I+D incrementada | 42% | Gastos que excedan media de los dos años anteriores |
Deducción personal investigador | 17% adicional | Personal con dedicación exclusiva a I+D |
Deducción innovación tecnológica | 12% | Actividades de innovación no clasificadas como I+D |
Patent Box | 60% reducción | Ingresos por cesión de activos intangibles |
Impacto de la ley de startups de 2022 en el ecosistema emprendedor
La Ley de Fomento del Ecosistema de Empresas Emergentes, conocida comúnmente como Ley de Startups, aprobada en diciembre de 2022, representa un hito en el marco regulatorio español para la innovación. Esta normativa introduce beneficios fiscales específicos para startups y sus inversores, simplifica trámites administrativos y crea un entorno legal más favorable para el emprendimiento tecnológico.
Entre las medidas más destacadas se encuentra la reducción del tipo impositivo del Impuesto sobre Sociedades del 25% al 15% durante los primeros cuatro años desde que la base imponible sea positiva. Asimismo, se aumentan las deducciones para inversores, permitiendo deducir hasta el 50% de la inversión en el IRPF con un límite de 100.000 euros anuales, lo que supone un importante estímulo para la inversión en fases tempranas.
La ley también incorpora medidas específicas para atraer talento internacional, como un régimen especial de visados para nómadas digitales y un procedimiento simplificado para la obtención de la residencia. El impacto de estas medidas ya se está notando en el incremento de profesionales extranjeros que eligen España como base para sus proyectos, contribuyendo a la diversificación y enriquecimiento del ecosistema emprendedor.
Programas neotec y CDTI para financiación de proyectos innovadores
Los programas de financiación pública como Neotec y las diversas líneas del Centro para el Desarrollo Tecnológico Industrial (CDTI) constituyen piezas fundamentales en el panorama de apoyo a la innovación empresarial en España. El programa Neotec, dirigido específicamente a empresas tecnológicas de reciente creación, ofrece subvenciones de hasta 250.000 euros que cubren hasta el 70% del presupuesto del proyecto, sin garantías adicionales.
El CDTI, por su parte, gestiona diversos instrumentos financieros adaptados a diferentes fases y necesidades de los proyectos innovadores. Desde préstamos parcialmente reembolsables para proyectos de I+D hasta la inversión directa en startups a través de su vehículo Innvierte, el CDTI proporciona aproximadamente 1.500 millones de euros anuales en apoyo a la innovación empresarial.
Una característica distintiva de estos programas es su orientación hacia la transferencia de conocimiento y la aplicación práctica de la innovación. El CDTI no solo proporciona financiación, sino que también facilita el acceso a redes internacionales y apoya la internacionalización de empresas innovadoras mediante programas específicos como INNTERNACIONALIZA o su red de oficinas exteriores en países estratégicos.
La combinación de estos instrumentos financieros con los incentivos fiscales mencionados anteriormente crea un ecosistema integral de apoyo que acompaña a las empresas innovadoras en todo su ciclo de vida, desde la fase semilla hasta la expansión internacional. Esta aproximación holística ha sido fundamental para el crecimiento sostenido del ecosistema innovador español.
Liderazgo español en sectores estratégicos de innovación
España ha logrado posicionarse como líder en varios sectores estratégicos de innovación que aprovechan ventajas competitivas del país. En energías renovables, empresas como Iberdrola, Acciona o Siemens Gamesa han convertido a España en referente mundial en tecnologías eólicas y solares, con una capacidad instalada que supera los 59 GW y exportando conocimiento y tecnología a mercados internacionales.
El sector biotecnológico español también ha experimentado un crecimiento notable, con más de 3.500 empresas que emplean a 223.000 profesionales según AseBio. Compañías como Pharmamar, Grifols o Oryzon Genomics destacan por sus avances en áreas como oncología, hemoderivados y epigenética, situando a España como el quinto país europeo en producción científica biotecnológica.
En el ámbito agroalimentario, la innovación ha transformado un sector tradicional en uno de los más competitivos internacionalmente. España es líder mundial en tecnología de riego eficiente, agricultura de precisión y biotecnología aplicada a cultivos, con empresas como Grupo Hispatec o Agroptima desarrollando soluciones digitales que están revolucionando el sector a nivel global.
El sector de movilidad sostenible representa otro ámbito donde España está ganando relevancia internacional. Además de Wallbox, empresas como Zeleros (desarrolladora de tecnología hyperloop), Civiparts (componentes para electromovilidad) o BeonD (baterías avanzadas) están posicionando al país como un hub para tecnologías de transporte del futuro, aprovechando la sólida base industrial automovilística existente.
Colaboración universidad-empresa como motor de transferencia tecnológica
La relación entre el mundo académico y empresarial ha experimentado una profunda transformación en la última década, evolucionando desde modelos tradicionales de colaboración puntual hacia ecosistemas integrados de innovación. Esta evolución ha sido fundamental para superar la histórica brecha entre la excelente producción científica española y su limitada transferencia al tejido productivo.
Actualmente, España cuenta con más de 80 parques científicos y tecnológicos que albergan a unas 8.200 empresas con una facturación conjunta superior a los 28.000 millones de euros. Estos espacios actúan como interfaces entre la investigación académica y su aplicación comercial, facilitando la transferencia de conocimiento y tecnología hacia el mercado.
El modelo de campus de excelencia internacional: UAB-UAM-UPF
El programa Campus de Excelencia Internacional (CEI) ha sido un catalizador para la modernización de las universidades españolas, promoviendo la especialización inteligente y la colaboración estratégica con el sector privado. Universidades como la Autónoma de Barcelona (UAB), la Autónoma de Madrid (UAM) y la Pompeu Fabra (UPF) han desarrollado modelos de campus que integran formación, investigación e innovación empresarial en ecosistemas completos.
El UAB Campus de Excelencia Internacional destaca por su especialización en ámbitos como la biomedicina y la nanotecnología, con más de 30 centros de investigación y una estructura de colaboración empresarial que incluye el Parc de Recerca UAB. Este modelo ha permitido la creación de más de 70 empresas spin-off y la firma de contratos de transferencia tecnológica por valor de más de 15 millones de euros anuales.
La UAM, por su parte, ha desarrollado un modelo de campus que integra centros de excelencia como el Centro Nacional de Biotecnología (CNB-CSIC) y el Instituto de Ciencia de Materiales de Madrid (ICMM). Su colaboración con el Parque Científico de Madrid ha facilitado la creación de más de 120 empresas de base tecnológica y la generación de un polo de innovación biomédica de referencia internacional.
Parques científicos y tecnológicos: ejemplos del PCB y parque tecnológico de andalucía
El Parc Científic de Barcelona (PCB) representa uno de los mejores ejemplos de integración entre investigación académica y empresa en España. Ubicado en el campus de la Universidad de Barcelona, alberga más de 100 empresas y entidades, principalmente del sector biomédico y farmacéutico. El PCB ha sido fundamental en el desarrollo del ecosistema biotecnológico catalán, facilitando el acceso de las empresas a infraestructuras científicas avanzadas y potenciando la transferencia tecnológica.
El Parque Tecnológico de Andalucía (PTA), localizado en Málaga, ofrece un modelo complementario enfocado en tecnologías digitales. Con más de 650 empresas que emplean a más de 20.000 trabajadores, el PTA ha sido crucial para la transformación de Málaga en un polo tecnológico internacional. Su vinculación con la Universidad de Málaga ha permitido desarrollar programas específicos de formación adaptados a las necesidades del tejido empresarial local, especialmente en ámbitos como la ciberseguridad y la inteligencia artificial.
Los parques científicos y tecnológicos han evolucionado desde simples concentraciones de empresas hacia verdaderos ecosistemas de innovación donde la transferencia de conocimiento ocurre de manera bidireccional. El valor ya no está solo en la proximidad física, sino en la creación de comunidades integradas de innovación con objetivos compartidos.
Cátedras de empresa: colaboraciones exitosas como Telefónica-UPM y Santander-IE
Las cátedras de empresa representan un mecanismo consolidado de colaboración a largo plazo entre universidades y compañías privadas. España cuenta actualmente con más de 500 cátedras que combinan investigación aplicada, formación especializada y transferencia tecnológica en ámbitos estratégicos. Estas estructuras permiten a las empresas acceder a talento investigador de primer nivel y a las universidades orientar parte de su investigación hacia necesidades reales del mercado.
La Cátedra Telefónica-UPM destaca como caso de éxito en el ámbito digital. Establecida en 2001, ha desarrollado más de 60 proyectos de investigación aplicada en áreas como big data
, inteligencia artificial y ciudades inteligentes. Su programa de captación de talento ha permitido incorporar a más de 150 ingenieros formados en la cátedra a la plantilla de Telefónica, mientras que sus investigaciones han generado más de 30 patentes internacionales.
La colaboración entre Banco Santander e IE University representa otro modelo de éxito, centrado en fintech y transformación digital del sector financiero. Esta cátedra ha impulsado la creación de un laboratorio de innovación financiera que ha incubado más de 25 startups y desarrollado metodologías de innovación abierta adoptadas internacionalmente. Su enfoque en investigación aplicada ha permitido implementar soluciones basadas en blockchain
e inteligencia artificial en operaciones reales del banco.
Programas de doctorados industriales: casos prácticos en biomedicina y energías renovables
Los programas de doctorados industriales, implantados en varias comunidades autónomas con Cataluña y País Vasco como pioneras, representan una evolución significativa en la formación de investigadores orientados al sector productivo. Estos programas permiten desarrollar tesis doctorales en entornos empresariales, garantizando la aplicabilidad de la investigación y facilitando la inserción laboral de investigadores altamente cualificados en el tejido industrial.
En el ámbito biomédico, destacan colaboraciones como la establecida entre Grifols y la Universidad Autónoma de Barcelona, que ha permitido desarrollar nuevas metodologías para la producción de hemoderivados mediante un programa de doctorado industrial que ha formado a 12 doctores actualmente incorporados a la plantilla de la compañía. Este programa ha generado 8 patentes internacionales y ha contribuido significativamente al liderazgo global de Grifols en su sector.
En energías renovables, la colaboración entre Siemens Gamesa y la Universidad del País Vasco ha establecido un programa de doctorado industrial centrado en el desarrollo de materiales avanzados para aerogeneradores. Los resultados incluyen nuevos composites que han permitido incrementar la eficiencia de las turbinas en un 15% y reducir los costes de mantenimiento en un 22%, contribuyendo a la competitividad internacional de la compañía.
Transformación digital de sectores tradicionales
La transformación digital de sectores económicos tradicionales constituye uno de los pilares fundamentales de la innovación empresarial española. Esta evolución ha permitido modernizar y aumentar la competitividad de industrias con gran peso histórico en la economía nacional, incorporando tecnologías avanzadas que han reconfigurado sus procesos productivos y modelos de negocio.
El impacto de esta digitalización es transversal, afectando desde la cadena de suministro hasta la relación con el cliente final. Las empresas españolas han demostrado una notable capacidad para adaptar tecnologías disruptivas a contextos productivos tradicionales, generando incrementos significativos en productividad, sostenibilidad y valor añadido.
Digitalización del sector agroalimentario español mediante AgTech
El sector agroalimentario español, tradicionalmente uno de los pilares de la economía nacional, ha experimentado una profunda transformación digital en la última década. La incorporación de tecnologías AgTech ha permitido desarrollar una agricultura de precisión que optimiza el uso de recursos, incrementa rendimientos y reduce el impacto ambiental. España se ha posicionado como el segundo país europeo en implementación de estas tecnologías, solo por detrás de Países Bajos.
Empresas como Hispatec han liderado esta transformación con soluciones que integran Internet of Things
, análisis predictivo y sensórica avanzada. Su plataforma ERPagro, implementada en más de 1.500 explotaciones agrícolas españolas, ha permitido incrementos de productividad superiores al 30% y reducciones en el consumo de agua cercanas al 25%. El impulso de programas públicos como el Programa de Digitalización del Sector Agroalimentario y Forestal ha sido fundamental para democratizar el acceso a estas tecnologías entre pequeños y medianos productores.
La incorporación de tecnologías blockchain para trazabilidad alimentaria representa otra innovación significativa del sector español. Iniciativas como la desarrollada por la empresa Carrefour junto a IBM han permitido crear sistemas de trazabilidad completa desde el campo hasta el consumidor, incrementando la confianza en productos españoles y facilitando su exportación a mercados premium internacionales.
Reinvención del sector turístico con soluciones smart destinations
España, primer destino turístico competitivo según el World Economic Forum, ha liderado la transformación digital del sector mediante el concepto de Smart Destinations. Esta aproximación integra tecnologías digitales para mejorar la experiencia del visitante, optimizar la gestión de recursos y garantizar la sostenibilidad del destino. Ciudades como Benidorm, Palma de Mallorca o Barcelona han implementado estrategias integrales que combinan aplicaciones móviles, sensores IoT y análisis de datos masivos para gestionar flujos turísticos.
La plataforma Smart Destination de Segittur, implementada en más de 30 destinos españoles, ha permitido desarrollar sistemas predictivos que optimizan servicios públicos en función de la afluencia turística. En destinos como Málaga, esta tecnología ha permitido reducir el consumo energético en un 23% y mejorar la satisfacción del visitante en 15 puntos porcentuales según encuestas oficiales.
Empresas como Mabrian Technologies han desarrollado soluciones de análisis de sentimiento que combinan inteligencia artificial y big data
para monitorizar en tiempo real la percepción del destino. Estas herramientas, adoptadas por más de 50 destinos internacionales, nacieron como una innovación española que ha revolucionado la forma en que los gestores turísticos toman decisiones basadas en datos para adaptar su oferta a las preferencias del visitante.
Industria 4.0 en el sector manufacturero: casos de SEAT martorell y airbus sevilla
La implementación de tecnologías de Industria 4.0 en el sector manufacturero español representa uno de los casos más exitosos de transformación digital. La fábrica de SEAT en Martorell se ha convertido en un referente internacional tras una inversión de más de 1.000 millones de euros en digitalización completa de sus procesos productivos. La implementación de más de 2.000 robots colaborativos, sistemas de realidad aumentada para mantenimiento y gemelos digitales para simulación de procesos ha incrementado la productividad en un 25% y reducido los tiempos de entrega en un 30%.
El caso de Airbus en Sevilla, centro de excelencia mundial para el ensamblaje final del A400M, destaca por su implementación de fabricación aditiva (impresión 3D) para componentes críticos. Esta tecnología ha permitido reducir el peso de determinadas piezas en hasta un 55%, con el consiguiente ahorro en combustible y emisiones durante la vida útil de la aeronave. La planta sevillana produce actualmente más de 3.000 componentes mediante fabricación aditiva, posicionando a España como referente en esta tecnología aplicada a la aeronáutica.
Ambos ejemplos ilustran cómo la industria manufacturera española ha sabido adaptarse al paradigma de la Industria 4.0, combinando la excelencia en procesos tradicionales con la implementación de tecnologías disruptivas. Este enfoque ha permitido no solo mantener la competitividad frente a países con menores costes laborales, sino incrementar el valor añadido de la producción y consolidar centros industriales avanzados en territorio español.